El Fotógrafo Perfecto: tocar de oído.

Como tantas otras personas, en algún momento de mi infancia pensé que quería ser músico. No tenía claro si mi modelo era Pau Casals o Javier Gurruchaga. El caso es que me apuntaron a clases de música. Muy rápido comprobé que la cosa no era tan sencilla. El solfeo resultó ser una barrera demasiado alta para mi débil motivación. Alguien me dijo que había casos de gente, como Jimmy Hendrix, que eran capaces de desarrollar el sentido musical basándose en su oído y en su amor por la música. Pensé que ése podría ser mi caso: “no tengo fuerza de voluntad, pero tengo un talento natural desbordante, que se ocupará de llevarme al firmamento.”

Estudié  pintura. Le dediqué algo de esfuerzo, pero todavía confiaba demasiado en mi capacidad natural para discernir lo bueno de lo malo. Una vez más,  no fue suficiente la intuición. Todavía no estaba preparado para cansarme.

Empecé a trabajar en una agencia de publicidad y entonces me enteré de lo que vale un peine. De pronto decenas de personas tenían por diversión personal el poner permanentemente en duda mi talento y capacidad artística. Mis sublimes creaciones sufrían las modificaciones constantes de personas que no estaban dotadas del genio divino necesario para opinar acerca de ellas.

Como resultado de estas dos aproximaciones antagónicas, decidí dedicarme a algo que había estado siempre en mi cabeza, pero a lo que no le había dedicado mucha atención. Abandoné mi trabajo y me hice fotógrafo. Pero esta vez había aprendido la lección y recordé las sabias palabras del bueno de Bismark: “Para los jóvenes sólo tengo tres consejos: trabajo, trabajo y trabajo.”

Desde entonces, y de esto hace ya casi diez años, tengo la inmensa fortuna de ganarme la vida haciendo fotos. Pero sabed que a casi nadie le gusta el trabajo que haces por encargo. Siempre quieren saber qué es lo que haces cuando no tienes encargos, lo que resulta en que debes desarrollar dos carreras paralelas: una personal con la que das rienda suelta a tus inquietudes, sin rendirle cuentas más que a ti mismo y otra profesional en la que te dedicas, precisamente, a rendirle cuentas a todo el mundo, todo el rato. Y con estos, se cumplen dos de los “trabajos” que recomendaba el Kaiser.

El tercero consiste en conseguir que tu vida familiar y afectiva, se mantenga en pie y que ninguna de las tres facetas devore a las demás. “Trabajo, trabajo y trabajo”.

Efectivamente, ya no cuento con el muy escurridizo talento y sí con el irrefrenable poder del esfuerzo. He aprendido cosas que no sabía, he leído muchísimo, me he obligado a comprender lo que me resultaba incomprensible y he desarrollado una cierta desconfianza hacia los que empiezan sus frases diciendo “Lo que tú tienes que hacer es…”

Y después de esta parábola de Todo a 100, ahí va mi conclusión acerca de El Fotógrafo Perfecto.

La cosa nace de la observación de que hay miles de fotógrafos profesionales o no, famosos o no, viejos y jóvenes de todos los sitios del mundo, que hacen un tipo de fotografía muy parecida entre sí. Y yo me digo: ¿cómo es esto? ¿cómo es posible que tanta gente coincida en algo tan personal como es el trabajo personal?

Porque las coincidencias de estilo en el ámbito profesional no son infrecuentes. Las empresas que se sirven de la fotografía para transmitir su imagen y su personalidad siempre juegan sobre seguro: reclaman imágenes hechas de manera que coincidan con códigos ya establecidos y reconocibles. Casi nunca rompen esquemas, sino que más bien buscan esquemas a los que adscribirse.

Pero que eso ocurra en el ámbito de la fotografía artística me resulta bastante extraño.

La fotografía como expresión artística ha experimentado un impresionante auge en los últimos 10 años. Los años en los que la tecnología digital ha hecho la mayor parte de su camino. Este tiempo coincide con los años en los que ciertos fotógrafos como Shore o Sternfeld (que trabajan con antiguas cámaras de gran formato) han tomado las galerías al asalto.

Cuando hace un año Stephen Shore dio una conferencia en Alcalá de Henares en el ámbito de Campus de Photoespaña, me quedé maravillado de oírle decir con cierto hastío que su fotografía respondía a unas necesidades ópticas específicas destinadas a estudiar el efecto visual por el cual nuestros ojos proceden a enfocar distintos planos, aunque recorran una superficie bidimensional. Nada de poesía del silencio. Nada de la belleza de lo vulgar. Nada intangible, todo razonado y explicado.

Sternfeld con “Walking the Highline”, “Oxbow Archive”, o “Sweet Earth”, tiene un discurso conservacionista y ecológico. Un trabajo fotográfico al servicio de un fin específico.

Es decir, eso que parece la foto de un parking vacío y punto, en realidad tiene una razón de ser que trasciende el hecho fotográfico en sí.

Yo creo que hasta cierto punto nos hemos sentido avalados y nos hemos lanzado a fotografiar todos los descampados de nuestros barrios, comprobando jubilosos, que vista en una pantalla de ordenador, nuestra foto de un descampado luce muy parecida a la de Sternfeld.

Creo que estamos en una fase en la que confiamos demasiado en nuestro talento natural y sintiéndonos relajados porque lo que hacemos con muy poquito esfuerzo, se parece sorprendentemente a aquellos que pueblan las paredes de los museos del mundo. Creo que a veces nos conformamos con tocar de oído. Que nos da pereza seguir con el solfeo y confíamos en que la similitud formal de nuestro trabajo con el de los maestros haga de nosotros los artistas que soñamos ser.

Para aquellos que copian los esquemas ajenos, aquellos que se ocupan de fotografiar cosas que simplemente amplían las series de sus maestros, tengo sólo tres palabras: ”contenido, contenido y contenido.” No se puede fotografiar indefinidamente la melancólica angustia de las áreas semiurbanizadas de las periferias. Es importante que sepamos para qué sirve todo eso. Es importante saber que la fotografía no debería ser entendida exclusivamente como un atajo a través del cual podemos llegar a una posición social atractiva. Y también creo necesario subrayar que la actividad fotográfica dirigida sólo a uno mismo o a un número reducido de compañeros, es lo más parecido a un hobby  (y aquí es donde me echan a los perros).

La fotografía, como dice Ricky Dávila en esta maravillosa entrevista, es un arte, pero también es un oficio.

Hoy podéis ver la web de El Fotógrafo Perfecto, pero pudiendo leer de quién son las fotos que componen ese portfolio.

Este Fotógrafo Perfecto es absolutamente imperfecto como fotógrafo, pero totalmente perfecto como guía estilística formal para los que quieren un camino bien allanadito por el que transitar sin riesgo, sin esfuerzo y casi casi pareciendo un artista. El Fotógrafo Perfecto es la respuesta definitiva para los que buscan un autor al que imitar. Un compendio de ejemplos con el que hacer fotos que cuelen.

Gracias a los que colaboraron mandando fotos. A los valientes que propusieron su propio trabajo como ejemplo, les doy las gracias muy especialmente. Han demostrado estar dispuestos incluso a ponerse en duda a sí mismos con el fin de ahondar en sus propias motivaciones.

Para la semana que viene, algo más ligerito, lo prometo.

38 respuestas to “El Fotógrafo Perfecto: tocar de oído.”

  1. FireMan Says:

    Me quedo con muchas frases de este post. Y me vuelvo a atrever a sumarme al triconsejo: «Diversión, diversión, diversión»

  2. Guerra y Paz » Blog Archive » ‘El fotógrafo perfecto’ Says:

    […] Con el título El Fotógrafo Perfecto, Carlos Spottorno lanza esta iniciativa, que presenta así en su blog: Este Fotógrafo Perfecto es absolutamente imperfecto como fotógrafo, pero totalmente perfecto […]

  3. Antonio Muñoz De Mesa Says:

    Yo, que llevo poco tiempo enamorado-obsesionado-enganchado a la fotografía, me tomo estos inicios como cuando hacía katas en kárate. Todos los karatekas ejecutábamos la misma kata cada día. Los mismos movimientos. Todos eramos copias de un kata supremo al que aspirábamos emulando su forma concreta. Y un día, diez años después, haciendo la misma kata de siempre, resulta que la kata «suprema» parecía tu propia kata, tu propia forma. Nada había cambiado en los movimientos, todo había cambiado en la calidad al ejecutarlos. El peligro de este viaje es que puede llevarte en dos direcciones muy diferentes: la «kata» autocomplaciente (aquellos karatekas a quienes no podías decirles que la kata estuviera mal pero que por alguna misteriosa razón no te emocionaban) y la «kata» auto-retrato (aquellos karatekas que ejecutando los mismos movimientos que tú ejecutabas cada día te conmovían, te hipnotizaban y provocaban identificación). La fotografía autocomplaciente es el becerro de oro de este periodo de democratización técnica. La foto que revela al fotógrafo y que nos revela a los demás a través de una porción de lo que se conoce como «realidad» es la kata suprema. Rara avis. La aventura no está tanto en conseguir hacer tuya la kata sino en intentarlo sin caer en la tentación de la foto perfecta. Amén.

  4. JOrge Says:

    BUeno el post y buena la iniciativa del «Fotógrafo perfecto». Yo voy a cotillear la página ya!

    Saludos.

  5. Antonio Muñoz De Mesa Says:

    He estado viendo el experimento y hay un error que debe ser subsanado! La foto que yo envié es de Gerardo Custance pero aparece como mía ;) Un abrazo!

  6. larraz Says:

    Ponerse en duda a uno mismo me parece lo más importante del trabajo propio. La duda es un monstruito que llevo subido a la chepa desde que me levanto de la cama.

    Ha sido un gran post.

  7. Pedro Arroyo Says:

    Una de las conclusiones que podríamos sacar de este experimento es que no debemos quedarnos tan sólo en el aspecto formal de las imágenes. Es muy sencillo copiar a los grandes como Shore o Sternfeld, lo que debemos intentar es convertir en imágenes nuestra experiencia personal, en mi opinión ese es el único camino para conseguir una obra original que aporte algo nuevo a lo anterior.

    De esa manera las imágenes a pesar de compartir una composición, un espacio, un tiempo van a tener una nueva extra que será mostrar nuestra comunicación.

  8. Salva Says:

    Muy muy interesante.
    Estoy bastante o muy deacuerdo con lo que dices.
    Esta noche me lo volveré a leer con calma. A ver si puedo razonar una respuesta.
    Curioso que alguien pusiera una foto mia (aparte de yo mismo) hehe.

    Saludos!

  9. manolovalmorisco Says:

    Llegue tarde para participar en el «Fotógrafo Perfecto» pero cuando abri el album pensé:
    ¿Hemos pasado de la dictadura National Geographic a la dictadura Wallpaper?
    En cuanto al post de hoy, me parece muy revelador y bien hilado . Solo que algunos de los grandes fotografos que más me gustan no se si entran en «contenido, contenido,contenido». Son más «mi, mi, mi mirada» (cuatro «mi» en una frase, esto parece una melodía) Un abrazo .

  10. Oscar Says:

    Totalmente de acuerdo con el artículo, pero tengo una pregunta, qué salida le queda a uno si la mayoría de galerías, revistas, etc… de fotografía contemporánea buscan Shores o Sternfelds (o Ruffs o Gurskys)? Estoy suscrito a varios blogs de fotografía extranjeros y muchos de los trabajos que veo se podrían clasificar en corrientes estilísticas bien definidas. La verdad es que me gustaría que hubiera más variedad, pero parece que el mercado busca justo lo contrario.

  11. Josefina Says:

    Yo tuve la grandísima suerte de estar en el curso que Shore impartió en Madrid en verano y es cierto que hablaba de como organizar el espacio para que resultara atrayente pero también hablo del pensamiento visual y de la realidad en un estado superior de consciencia, etc.
    Coincido en algunas de las cosas que he leido pero, ahora mismo tengo demasiado sueño como para contestar algo coherente, quizá mañana.
    Eso sí me apunto al triconsejo «diversión, diversión, diversión».

  12. Javier Carrión Says:

    Realmente no sé que decir…. pero siento la necesidad de contestar algo a este magnifico post. Me siento muy identificado con lo que dices en los primeros párrafos, casi que es la historia de mi vida.

    Es la eterna pregunta, ¿qué hacer? da igual que pintes o fotografíes. Todo esta hecho, da igual lo que hagas que ya vendrá alguien a decirte a quien te pareces, o directamente a insinuar que le copias….

    yo por ahora me quedo con: trabajo, diversión, trabajo, diversión, y asi…

  13. Gabriel Says:

    Yo creo que cualquier persona con un poco de sentido crítico se daría cuenta de que si una foto de este estilo aparece en El Cuore (revista que me encanta, todo sea dicho, y buenísima en lo suyo) como ejemplo del arte más actual, es porque ya no es nada actual.

    Las tendencias son así para todo. Cuando están masificadas ya no hacen gracia salvo para ironizar sobre ellas en facebook en plan «Señoras que hacen fotos de descampados para representar la belleza de lo vulgar».

    La fotografía es un arte y un oficio, por supuesto. El trabajar, trabajar y trabajar (o mirar, mirar y mirar, y leer, leer y leer) es lo único que hará que nuestras fotos al final transmitan un mensaje más o menos original aún cuando solo sigan siendo imágenes de descampados y gente de espaldas a la cámara (esto último lo dudo mucho).

    El tema que ha planteado Oscar es muy interesante también. El mercado del arte, esa burbuja a punto de explotar.

  14. spottorno Says:

    Fireman, acepto la diversión como motor fundamental para la creación. Ha sido un olvido imperdonable por mi parte. El asunto es que creo que cuando uno trabaja en lo que le gusta, se divierte. Y si no es así, es que no le gusta de verdad lo que hace. Como a mí con el solfeo.

    Guerra y Paz, gracias por la reseña. Interesante tu blog también. Ya lo conocía, aunque no recuerdo cómo llegué a él.

    Antonio Muñoz de Mesa, creo entender en tu parábola de la kata que opinas que no hay que tener la ambición de hacer algo original, sino que la originalidad es una consecuencia en hacer las cosas de modo personal. Estoy muy de acuerdo con ese punto de vista. Siempre he creído que si el contenido de lo que uno cuenta es personal y relevante, el aspecto formal lo será también de modo natural. Porque al revés que el famoso “be water my friend” de Bruce Lee, yo creo que el continente se adapta al contenido.

    Jorge, bienvenido. Espero que te entretenga el cotilleo.

    Larraz, gracias por el piropo. La duda, sí, esa compañera permanente. Yo soy muy amigo.

    Pedro, creo que compartes punto de vista con A. Muñoz de Mesa. ¿Te gustaría comentar tu proyecto sobre la gente en la playa?

    Salva, si, has aparecido 2 veces. Me alegro de que te haya gustado. La verdad es que me encantaría que nos hablaras de si ves tu trabajo reflejado en este post o no. A mí me gusta mucho, pero en algunos casos me pregunto cuál es el contenido.

    Manolovalmorisco, creo que la dimensión “mi, mi, mi, mirada” es efectivamente importante. Y ahí es donde la fotografía entronca con la muy inasible poesía. Un terreno en el que aún no me muevo bien, aunque vislumbro que con los años será el único que toque.

    Oscar, ahí voy a ser un poco crítico: lo que el mercado busca no debería ser el motor de un trabajo personal. Sonará infantil o naïf, pero creo que la presencia en una galería, o el reconocimiento del público debería ser una consecuencia del buen trabajo, y no el fin por el que se trabaja.

    Josefina, si, el pensamiento de Stephen Shore no se puede resumir en una frase, es cierto. Me alegro de que estés de acuerdo con parte de lo dicho, pero también estoy esperando a que descanses y propongas los puntos de desacuerdo. Seguro que los hay y tienen razón de ser.

    Javier Carrión, bueno, no me lo tomaría tan a la tremenda. No se trata de que alguien te diga si copias o no, se trata de si uno está satisfecho con lo que hace o se engaña un poco a sí mismo, lo que a decir verdad, siempre me ha parecido profundamente imposible.

    Gabriel, ¿el ejemplo de Cuore es real, o hipotético?

  15. Oscar Says:

    Dices que lo que el mercado busca no debería ser el motor de un trabajo personal. Totalmente de acuerdo contigo. En mi caso particular no lo es, soy un simple aficionado sin muchas aspiraciones. Pero, ¿no crees que el hecho de que actualmente encontremos muchos trabajos personales con una línea estilística similar es, en parte, consecuencia de la gran influencia que tiene el mercado del arte? Yo creo que sí, sino no me explico la cantidad de fotos de descampados de extrarradio o de adolescentes con la mirada perdida que veo cada día en los blogs a los que estoy suscrito.

  16. Gabriel Says:

    Me ha salido un comentario muy de troll y muy prepotente teniendo en cuenta que yo soy el primero que tengo todo por aprender todavía. Os pido disculpas a todos.

    Carlos, el ejemplo del Cuore es hipotético, pero podría ser real. No lo se.

    De cualquier manera lo importante no es apuntar con el dedo cuánto se ha masificado una tendencia.
    Este hecho no es más que el resultado de la poca curiosidad de muchos fotógrafos o el poco interés en asomarnos a mirar qué hay más allá de flickr, en gran parte debida a la falta de espacios como este en los que se hable de fotografía, en castellano y desde un punto de vista crítico y lúdico, —tu proyecto curatorial, Carlos, me ha parecido muy inteligente además de educativo— del que todos saldríamos ganando.

    Así que larga vida al blog y al debate fotográfico. Y nada de darnos descansos tan largos, eh? Queremos caña!

  17. Diego Says:

    Carlos, coincido con Gabriel en que el valor didáctico de tu blog es enorme. Mil gracias por la dedicación. También coincido con él en apuntar, junto a trabajo, diversión y contenido, a la curiosidad como componente esencial de esta especie de mantra del (continuo) aprendizaje fotográfico.

    De todas formas, tengo la impresión que muchas de las reflexiones que estamos haciendo, relacionadas con contenido, visión y continente, están demasiado centradas en un tipo concreto de fotografía, esa de la que hablas tan a menudo y que domina hoy en día el mundo del arte. Una fotografía «contemporanea» en la que es preponderante la visión y la intención «del autor», por encima del sujeto fotografiado. Percibo un cierto desequilibrio hacia los aspectos mas conceptuales de la fotografía.

    Pero hay otros tipos de fotografía, pienso en la fotografía como herramienta documental, «mero» testigo mudo de un tiempo y de una sociedad. La fotografía que se limita a retratar e inventariar lo que ocurre a su alrededor, de forma similar, aunque mas certera, a cómo lo hace la memoria. (Son muy interesantes las opiniones de Publio López Mondejar recojidas en este artículo http://www.elpais.com/articulo/cultura/expertos/peligro/elpepicul/20080328elpepicul_3/Tes). Pienso en los poemas visuales de Chema Madoz o en la fotograia de naturaleza. Por poner algunos ejemplos.

    Al igual que Publio, pienso que en la fotografía cabe todo, visión personal y contenido, pero también experimentación, sueño, documento y por supuesto y no menos importante (al fin y al cabo es una disciplina visual) puro placer estético y contemplativo.

    Por otro lado, tampoco termino de estar de acuerdo en que el continente esté determinado por visión personal y contenido. Hay mas aspectos y en cualquier caso, se determinan todos mutuamente, ¿no?, quiero decir, que pienso que también visión personal y contenido están influidos y en cierta forma, determinados por el continente y sus aspectos técnicos asociados. Y sobre todo en una disciplina como la fotografía, con un componente técnico, tan rico, complejo y variable, que juega un papel tan importante. Tanto la elección de la herramienta fotográfica (medio formato, reflex, digital, analógico, tipo de película,…) como en lo relativo al revelado o posprocesado de los negativos (analógicos o digitales), muy a menudo tomamos decisiones que están totalmente condicionadas por nuestro «conocimiento técnico». Sin embargo, estas decisiones van a tener un impacto tremendo, en el aspecto final de la imagen, pero también en el contenido. Quiero decir, si usas una cámara analógica de medio formato y película kodak portra, puedes estar bastante seguro del aspecto visual que van a tener tus fotografías. De igual forma, si te vas a hacer fotografía «de calle» con tu enorme cámara de medio formato y un trípode, también puedes estar bastante seguro del tipo de fotografía que puedes obtener.

    En cualquier caso, hay tanto que hacer y tan poco tiempo …

  18. Pedro Arroyo Says:

    Carlos, es cierto, por lo comenta Antonio, que compartimos puntos de vista. Yo no tengo un estilo prefijado, me gustan muchos tipos de fotografía. Me encantan Stephen Shore y Xavier Ribas por ejemplo pero también muchos otros diferentes.

    Repasando un poco las imágenes que voy creando últimamente me voy dando cuenta que utilizo la fotografía para observar aquello que me llama la atención y es una forma de conocerme mejor, de sacar a flote pensamientos que llevo dentro, una especie de terapia. Está claro que me expreso mejor con las imágenes que con las palabras y por eso supongo que he elegido la fotografía como medio para expresarme.

    Mi proyecto sobre la gente en las playas durante el invierno es un proyecto que va a crecer, incluso va a superar los límites de la playa. La idea surgió un día que fui a la playa a hacer unas pruebas con un filtro de densidad neutra, ese día me di cuenta de que estaba sólo en ese lugar, cosa extraña pues habitualmente vamos en verano cuando está llena de gente y me encontraba especialmente bien, últimamente disfruto de la soledad buscada, entonces pensé en capturar ese momento que tanto me atraía, era un tema puramente documental.
    De todas formas no es del todo cierto que no haya nadie en las playas en invierno, sí hay ciertos visitantes como yo en ese momento, fue entonces cuando pensé en utilizar aquellos visitantes como una representación de mi mismo. Como el tema que quiero comunicar es la soledad, vi que utilizando un plano extremadamente largo y abriendo mucho el plano, la figura de la persona queda empequeñecida y aumente el efecto de soledad. Finalmente como una cosa lleva a la otra, cuando una idea surge de dentro de manera honesta es curioso pero formalmente suela funcionar, y al menos en alguna imagen como la que aparece en este experimento, creo que funciona.

    Un saludo!

  19. Salva Says:

    ummm.. a ver.. Voy a intentar explicarme de como me identifico con el post. Me cuesta expresarme con palabras, por eso elegí el mundo visual, aunque he de luchar contra ello, las palabras son importantes también.

    Veamos, yo realmente acabo de empezar en el mundillo, hace poco más de dos años que hice mi «primera» foto.

    Para mi, la fotografía es un modo en que puedo reflexionar sobre mi mundo (con ello, me refiero a cualquier cosa que me interese) y entorno y poco a poco dar a conocer eso a los demás.

    Por alguna razón que desconozco hasta que no vi la estética del «fotógrafo perfecto» la fotografía no me había había llegado con mucha fuerza. Lo primero que recuerdo ver fue el proyecto de Corea de Norte de Charlie Crane. En ese momento me dije a mi mismo que quería hacer fotos como esas.

    Lo que tengo en la web hasta el momento, en general es un trabajo muy intuituvo y formal, buscando una estética e intentando dar una impronta personal en esta estética y no un trabajo muy conceptualizado. Yo provengo del diseño gráfico dónde la esencia es la belleza de la imágen en si y no tanto lo que quieres contar.

    Centrándome en los tres proyectos que tengo en la web, la verdad es que no es nada nuevo, uno de playas en invierno (se han hecho mil), otro de abuelos (se han hecho mil más) y el otro que ya es compartido con mi pareja.
    Los tres han sido muy poco planificados, empezar a hacer fotos bajo un concepto muy primario y ale, a ver que salía.
    El de mis abuelos en concreto, quizás si tiene algo mas especial ya que durante ese tiempo he vivido con ellos y se nota una carga más emocional. Aparte que con el tiempo ha ido tomando forma y creciendo al ritmo que yo lo hacía.
    Por cierto, espero poner un texto de cada proyecto en breve en la web.

    El caso es que actualmente he realizado algunos cursos, empiezo a ver de que va el cotarro, donde la imágen es «secundaria» y lo importante es lo que quieres contar. Ya no me vale con hacer unas fotos bonitas, no vale con tocar de oido como tu comentas. Al menos si lo que quieres es entrar seriamente en el tema y evolucionar como fotografo/artista. Aunque quizás pierdes un poco de esa esencia de salir a hacer fotos. Ahora me lo pienso dos veces antes de salir con mi pesada cámara, aunque siempre llevo una pequeña 35mm encima para lo que pueda pasar (estas fotos las cuelgo a modo de diario en mi blog http://marcandoelcamino.tumblr.com). Es interesante ver también a posteriori las fotos que haces y meditar sobre la elección de la misma, espero a partir de aquí sacar algunas cosas.

    Creo que hay tantísima gente que hace fotos bonitas que la única manera de diferenciarte de ellos es ir más allá y tener un discurso «propio» y bien desarrollado.

    Ahora mismo me encuentro un poco colapsado de tanta información recibida, intentando procesarla. Estoy trabajando en algunas cosas, pero no se cuando habrá algún resultado..

    Noto que mi interpretación de la fotografía ha cambiado, miro flickrs, blogs etc. y las fotos «bellas» (aunque hay excepciones) no me dicen nada sino me cuentan algo más. Y noto que mucha gente se ha apuntado al carro, porque es un tipo de fotografía aparentemente fácil, pero de fácil tiene poco y más si eres alguien como yo que se cuestiona constantemente lo que hace, perfeccionista y no le vale cualquier cosa.. Es una lucha constante contigo mismo, sin saber muy bien porque lo haces, pero cuando obtienes los resultados que quieres y te lo valoran, no hay sensación que lo iguale.

    Para acabar, agradecerte de nuevo tus aportaciones, siempre interesantes y muy didácticas.

    Saludos,
    Salva.

  20. Josefina Says:

    Me cuesta mucho hablar y más cuando entre los comentarios hay fotógrafos que admiro ( ejemplo: Salva ).

    Yo creo que a la hora de crear hay dos caminos.
    Uno de ellos es ver una foto y pensar: quiero hacer fotos como estas. En ese caso el fotógrafo intentará tocar de oido, como tu dices, tocar por imitación y realizar una fotogarfía que se parezca a esa foto que a el en principio le gustó. Si tiene suerte saldrá una imitación que mas o menos sea valida.
    Pero la foto que le inspiró, no fue fruto de la imitación sino, de las investigaciones personales del fotógrafo. Por eso no la igualara.

    Creo que, si he llegado a realizar fotografias de este tipo, f ha sido por un camino razonado y no de imitación.
    Me mandaron un trabajo de arquitectura y enloquecí, y ahora no paro de fotografiarla porque veo la arquitectura como una representación de la cultura que me rodea. Intento ver esta expresión y captarla, pero aunque me resulte complejo, no dejo de hacerlo. Y aunque vea que hay gente que hace este tipo de fotografía y eso, no puedo evitar que me de rabia, tampoco quiero dejar de hacerla, porque si la hago es porque mis intereses me han llevado a ella de algún modo, igual que me interesa mi cocina o los cajones por abrir. Y además quien sabe a donde llegara esta investigación personal.Lo importante es divertirse, disfrutar fotografíando y ser honesto.
    Creo que es una lucha constante de contradicciones y preguntas que vale la pena batallar. Me gustan estos debates y este blog.
    Un beso.

  21. JG Says:

    Otra vuelta de tuerca:

    http://www.pdnpulse.com/2010/02/copycat-or-not-part-ii-the-plot-thickens-with-more-comparison-images.html

  22. spottorno Says:

    Oscar, pues si, creo que en parte lo que hace que las cosas sean como son, es lo mucho que incide en la gente el deseo de ser un artista reconocido, según los parámetros habituales de lo que significa el éxito.

    Gabriel, gracias por animarme a seguir dando caña. Empezaré por tu comentario: ya sé que hoy en día se dice «proyecto curatorial», pero lo correcto sería «proyecto de comisariado», ya que significa lo mismo y es una expresión preexistente. Es mejor usar «usar» que utilizar «utilizar». Saludos :)

    Diego, apuntas varias cuestiones, pero no acabas de proponer una conclusión, ni tampoco una pregunta. Creo que me quedo un poco con la idea de que opinas que hay tantos tipos de fotos como autores, en función de sus ideas y de las decisiones técnicas. Son asuntos muy amplios. Tendríamos que abordarlos por partes, creo. El artículo de Publio no está disponible en el link que marcas. ¿Está en algún otro lado?

    Pedro, con todo el cariño: que una foto de un gran espacio, en el que hay una pequeña figura humana expresa la sensación de soledad, es algo que todos saben. Claro que funciona. Lo llamativo sería poder expresar la soledad haciendo la foto de la celebración de un equipo de baloncesto, de su victoria olímpica, por ejemplo. Será interesante ver cómo evoluciona tu proyecto.

    Salva, conozco esa sensación: uno se aproxima a la fotografía a través de su experiencia previa. En tu caso, a través del diseño gráfico. Los más, se quedan tranquilos dándole gusto al ojo repitiendo sus propios trucos indefinidamente. Los menos, como parece ser tu caso, se toman la molestia de ir a cursos y de cuestionarse qué es lo que hacen y hacia dónde van. La parte visual en tu trabajo es muy potente. No me cabe duda de que el contenido irá cogiendo importancia, hasta que sea casi lo único que importe. Y yo que lo vea.

    Josefina, si, a mí también me gustan los debates y los cajones por abrir, aunque a veces me lo pienso un poco, no vaya a ser que abra la caja de Pandora y la liemos.
    ¿Quién soy yo, ni nadie, para cuestionar lo que te mueve a hacer las fotos que haces? En tu primer párrafo hablas de las fotos que se hacen a imagen y semejanza de otras. hablas de la diferencia entre la imitadora y la imitada. Tienes razón, pero es que yo veo muy a menudo a gente que imita a gente, que imita a otra gente, que imita a gente, que imita a otra… La metafotografía es en sí una disciplina, claro.

    JG, no me esperaba menos. Le has dado a este debate el punto final definitivo. Me he quedado de piedra y a mismo tiempo relajado, ¿no?

  23. Pedro Says:

    Tienes razón Carlos, es bastante obvio, vamos a ver como avanza el proyecto porque representar la soledad es algo muy complejo, espero poderlo conseguir insistiendo en el tema.

    Por cierto has visto algunas imágenes del pintor Jesús Mari Lazkano? Algunas tienen mucho en común con el fotógrafo perfecto. Ahi va una muestra de esas imagenes; http://www.flickr.com/photos/jon-ntx/3501641127/in/set-72157617609494179/

  24. Diego Says:

    Es curioso, han debido modificar el link, espero que ahora si: http://www.elpais.com/articulo/cultura/expertos/peligro/elpepicul/20080328elpepicul_3/Tes

    Con mi extenso comentario, trataba de enfatizar la importancia del continente (forma, técnica, …) en fotografía, que me parecía un tanto relegado en opiniones anteriores.

    Básicamente, reflexionaba que siendo la fotografía una disciplina visual, creo que el continente (aspectos formales y técnicos) tiene especial importancia, y condiciona y modifica muchísimo el contenido (tema) y su interpretación. No es simplemente una mera consecuencia de contenido y visión personal, opino. ¿No puede ser también el continente un punto de partida en vez de una consecuencia? Creo que sí.

  25. mrdaine Says:

    Me ha encantado el post, creo que enumera de manera incisiva y muy clara más de una pregunta que me he hecho en relación a la (mi) manera de hacer fotos. Enhorabuena, la galería es, además, impresionante.

  26. Descubrimientos: tutti frutti y caza mayor. « Fotógrafos y fotografía Says:

    […] hay currículums muy exhaustivos que dan más información de la que le conviene a su autor. De fotógrafos perfectos, ni hablemos. Hay unos […]

  27. Sergio Jaén Lara Says:

    El momento indecisivo ha sido ya mas explotado que el decisivo, ya hay mas Shores sin discurso que Bressones, demasiados fotografiadores esquinas, de mesas vacías,…, podría nombrar a mas de uno subvencionado, pero no creo que sea de interés en el post.

  28. carlos de la calle Says:

    carlos, muy de acuerdo con este post y muy interesante todo lo que dices, como siempre. yo solo decir que a mí este tipo de fotografía de descampados y sitios solitarios me aburre soberanamente, y es cierto ¿cómo llegan tantos fotógrafos a realizar proyectos personales tan iguales?…porque es lo que se vende en las galerías, supongo, lo que gana premios (Purificación García paga un dineral todos los años por unos descampados)…el otro día fuí a ver aquí en sevilla parte de la coleccion de Telefónica de fotografía comtemporanea y me dejó frío, o más bien debería decir helado. Lo siento, no me gusta esta frialdad estética que ha invadido el mundo de la fotografía «de autor», donde la cualidad más importante del fotógrafo es conocer sitios donde no hay gente..
    sigue así carlos, tomate los descansos que quieras…pero cortitos. Saludos a Susana y al baby.

  29. Samuel Says:

    Me ha parecido muy interesante el post. Llegué a él desde un enlace de la página de Salva, un fotógrafo que admiro, y del que aprendo mucho.
    Creo que vivimos en constante «contaminación» estética. A mi personalmente me cuesta, mantener una coherencia en mis trabajos, y me siento profundamente influenciado por mi entorno.
    Creo que la fotografía de autor intenta «descontaminarse» de todas las influencias y se centra en los grandes fotógrafos.
    Sólamente espero que cada uno de su toque personal a su obra, sino en ningún caso se le podrá considerar «de autor».
    No hay nada mejor que cuando haces una fotografía alguien te diga, se nota que la has hecho tú.

    Saludos y genial post
    Creo que vivimos en constante «contaminación» estética. A mi personalmente me cuesta, mantener una coherencia en mis trabajos.
    Así que supongo que la fotografía de autor intenta «descontaminarse» de todas las influencias y centrarse en los grandes fotógrafos.
    El problema que le veo a la fotografía actual es que el término es que llegara

  30. elcalamarjorge Says:

    ni un solo perro, ¿a que te refieres con hobby?
    creo que ahí está el problema, en no hacer las fotos para uno mismo, en querer hacerlas para los demás, en la prisa por exponer y no me refiero sólo a buscar paredes (de bares en muchos casos) sino a webs o blogs donde alguien que empezó hace menos de una década a hacer fotos, ya tiene colgados diez, quince o veinte proyectos, sin profundidad y obviamente, con un interés, unicamente estético.
    mucho polvo rápido y poco hacer el amor.
    no se si he entendido del todo el experimento que habéis hecho. ¿que hay muchos fotógrafos sin contenido en sus proyectos? más que al contrario, pero creo que muchas de las fotos del «fotógrafo perfecto» forman parte de proyectos interesantísimos en el fondo (te guste o no la forma, que parece que no). ¿que la gente imita? por supuesto, desde que nacemos, aprendemos por imitación y se es consciente de ello, no creo que sea malo para empezar. tal vez el problema sea que algunos de estos proyectos se lleven pasta, bueno, pues si haces fotos por necesidad o incluso por diversión, como se comentaba, no tiene que importarte demasiado.
    seguro que este experimento sale igual con fotos que se parezcan a la obra de arbus o garcía-álix, anders petersen o chema madoz (del que he visto algún imitador entre los comentarios de este post), con foto de guerra o de moda.
    no se si la falta de contenido tiene que ver con el exceso de fotos y fotógrafos.

  31. oscaromi Says:

    Me parece muy de mal gusto la finalidad de éste proyecto, obviamente una foto de una serie no tiene mucho que decir pero tampoco te has preocupado en buscar la serie completa y comentarla… me extraña que un fotógrafo que se dedica a esto profesionalmente, no se preocupe de buscar el contenido de cada foto o serie.

    ¿No es más que una estrategia para que te conozcan? ¿Sensacionalismo? (yo diría que no hay más detrás de esto) te aplaudo porque ahora te conoce mucha mas gente, pero obviamente no para bien, descubrir quien hay detrás de tus fotos le quita interés a tu trabajo.

    Quedaste de puta madre para todos aquellos que no ven más allá que la estética…

  32. spottorno Says:

    Oscaromi, la verdad es que sí he buscado el contenido de los trabajos a los que pertenecen muchas de las fotos que aparecen en el Fotógrafo Perfecto, lo que pasa es que el propósito de este ejercicio nada tenía que ver con eso. Si lo vuelves a leer con atención desde el primer post, verás que el objetivo no es criticar ni ofender. El objetivo es estudiar. Comprender, analizar. La mayoría de los que han comentado este proyecto así lo han entendido.
    Acerca de la pregunta de si esto no es más que una estrategia para que me conozcan, no sé qué decir. Por supuesto que un blog es, en última instancia, un medio de expresión con el que pretendes que te conozcan y conocer. No veo qué otro fin puede tener. A mí me funciona. He conocido a gente muy interesante y a otra que no lo es tanto. Ahora te conozco a ti. En tu blog pusiste este proyecto en tus recomendaciones http://oscaromi.wordpress.com/recomendaciones/, pero ahora escribes un comentario como enfadado y acusando de cosas feas. No lo entiendo muy bien, pero supongo que o has cambiado de idea, o no has entendido de qué va esto.

  33. Cazadores y recolectores. « Fotógrafos y fotografía Says:

    […] Pero ¿existe algún subgénero? Pues claro: primero el más frecuente, el de los que fotografían situaciones cotidianas de manera cotidiana. Ahí metemos a casi todos los Fotógrafos Perfectos. […]

  34. Propongo un juego para este verano. « Fotógrafos y fotografía Says:

    […] a veces son inquietantes, cómicas, trágicas o simplemente incomprensibles. Algunas son del tipo fotos perfectas y otras son instantes decisivos. Total, que parece que una buena manera de hacer fotos es […]

  35. 400 Says:

    Este post es realmente necesario. Supongo que, igual que nosotros somos ahora actores de nuestra propia realidad artística, esto ha ocurrido en todas las épocas. Hace poco estuve en la exposición del Guggenheim sobre los pintores flamentos del XVII y, aunque era espectacular, no pude dejar de pensar a veces «joder, pero si estos dos cuadros son casi iguales» (pintados por personas diferentes y con 100 años de diferencia). Ahora los pintores somos nosotros, y es muy difícil abstraerse de las influencias. La diferencia es que, entonces, veías un par de cuadros a la semana, y pintabas, y no eras muy consciente de hasta qué punto estabas modelando tu obra según lo visto. Ahora, en 10 minutos frente al ordenador te tragas el cuerpo de trabajo de 40 años de 3 fotógrafos, y encima ves todas tus fotos luego en 5 minutos. Eso es duro e intelectualmente agotador.

  36. Pierluigi Riccio | CUATROCIENTOS Says:

    […] están de moda y no son difíciles de emular? (En esta línea, recomiendo la lectura de este artículo, que analiza y pone de manifiesto así el asunto que nos ocupa). Pues bien, a mí estas fotos me […]

  37. Artículos sobre fotografía que deberías conocer (I) | Blog de fotografía de Javier Salvador Says:

    […] El fotógrafo perfecto: tocar de oido. Carlos […]

  38. Maria Says:

    Me gustó mucho lo que pusiste por aquí, me hizo pensar porque quizás sin saberlo hayas contestado sin yo preguntarte algunas cuestiones que me hacia. De momento le pregunté a la gente, pero por ahora nadie se ha atrevido a decir Esta boca es mia. De mientras les deje a las personas que leen mi blog, con éste extracto que escribiste que espero que haga ahondar en el verdadero significado a la hora de hacer click con nuestras cámaras…

    http://sindromecoleccionista.blogspot.com.es/2013/02/fotografos-nacen-o-se-hacen.html

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